Cruzamientos de razas

La heterosis se logra cuando se cruzan dos razas no relacionadas con diferente herencia genética. Cuanto menor sea la relación entre las razas, mayor será el grado de heterosis conseguido. Los efectos de la heterosis son los opuestos de la depresión causada por la consanguinidad, que es un descenso en el rendimiento del ganado lechero. Las investigaciones indican que la heterosis puede mejorar realmente los rasgos como vitalidad, fertilidad, salud y supervivencia. También hay indicaciones que muestran que la heterosis puede aumentar la producción en comparación con el promedio del progenitor. La heterosis es el valor genético añadido extra que se genera sobre el promedio del progenitor.

Cuando tenemos razas que comparten los mismos objetivos de selección genética, podemos obtener mejores resultados a partir del cruce de razas. Como ejemplo, tenemos dos razas lecheras y las cruzamos (por ejemplo, VikingHolstein y VikingRed); mantendremos los rasgos deseados en la producción lechera pero como beneficio añadido la cría cruzada tendrá mejores rasgos de fertilidad y salud.

Dos razas

El modelo más simple de cruce de razas rotacional es el cruzamiento de dos razas diferentes. La siguiente generación se denomina F1 y si la cría de este animal se aparea con una de las razas originales, a esto se le denomina un retrocruzamiento.

El nivel más alto de heterosis está siempre en la primera generación y el nivel disminuye en las siguientes generaciones. Cuando las vacas F1 se retrocruzan, en la generación F2 la heterosis cae a la mitad en comparación con el nivel en F1. La heterosis aumenta de nuevo en la generación F3, pero luego queda en el 67 % en algunas generaciones.

Aquí puede ver un ejemplo de un cruce Holstein y VikingRed y el desarrollo del nivel de heterosis en las diferentes generaciones.

Tres razas

El cruce de tres razas se considera como el sistema de cruzamientos óptimo, ya que la heterosis permanece más alta que en el cruce de dos razas. Cruzando a cuatro razas se puede lodrar una heterosis aún más alta, pero mantener la rotación correcta es más complicado y es más difícil encontrar a cuatro razas que se complementen entre ellas y que provengan de poblaciones no relacionadas. El cruzamiento de cuatro razas, por tanto, no es recomendable.

En el cruczamiento de tres razas, la primera generación también se llama F1, pero en vez de empezar el retrocruzamiento con las vacas, estas se aparean con una tercera raza. La heterosis permanece al 100 % durante las primeras dos generaciones, pero luego cae cuando se realiza el primer retrocruzamiento con una de las razas originales en la generación F3. Tras algunas generaciones, el nivel de heterosis se estabiliza al 86 %.

Conservaremos los rasgos deseados en la producción lechera, pero como beneficio añadido, la cría cruzada tendrá mejores rasgos de fertilidad y salud.